Por Alberto Benegas Lynch (h)
Diario de América
En esta oportunidad me limitaré a transcribir algunos textos breves de los Padres Fundadores en Estados Unidos para que los lectores saquen sus propias conclusiones y se formulen las reflexiones que estimen pertinentes, exentos de glosas y comentarios de cualquier naturaleza que sean.
James Madison (1792): “El gobierno ha sido instituido para proteger la propiedad de todo tipo [...] Éste ha sido el fin del gobierno, sólo un gobierno es justo cuando imparcialmente asegura a todo hombre lo que es suyo”.
James Madison (1788): “Hemos oído la impía doctrina del Viejo Mundo por la que la gente era hecha para el rey y no el rey para la gente.¿Se revivirá la misma doctrina en el Nuevo bajo otra forma- que la sólida felicidad de la gente debe sacrificarse a las visiones de aquellas instituciones políticas bajo una forma diferente?”.
James Madison (1800): “Los poderes delegados por la Constitución propuestos al gobierno federal son pocos y definidos”.
George Mason (1780): “Ahora bien, todos los actos de la legislatura aparentemente contrarios al derecho natural y a la justicia son nulos, según nuestras leyes y deben serlo según la naturaleza de las cosas [...] en conciencia estamos obligados a desobedecer las constituciones humanas que contradicen [aquellos principios fundamentales]”.
Alexander Hamilton (1788): “Voy más allá y afirmo que el bill of rights , en el sentido y en la medida para lo que se pretende no sólo resultan innecesarios en la Constitución sino que pueden resultar peligrosos [...] Puesto que ¿para qué declarar que las cosas no se harán cuando no hay poder de hacerlas?”.
Thomas Jefferson (1789): “La tiranía de los legisladores es actualmente, y esto durante muchos años todavía, el peligro más temible. Lo del poder ejecutivo vendrá a su vez, pero en un período más remoto”.
James Wilson (1782): “En mi modesta opinión, el gobierno se debe establecer para asegurar y extender el ejercicio de los derechos naturales de los miembros; y todo gobierno que no tiene esto en la mira, como objetivo principal, no es un gobierno legítimo”.
Thomas Jefferson (1792): “Se necesita un gobierno frugal que restrinja a los hombres que se lesionen unos a otros y que , por lo demás, los deje libres para regular sus propios objetivos”.
Thomas Jefferosn (1787): “Una pequeña rebelión de vez en cuando es algo bueno y necesario en el mundo político, tal como las tormentas lo son en el físico”.
George Washington (1796): “Establecimientos militares desmesurados constituyen malos auspicios para la libertad bajo cualquier forma de gobierno y deben ser considerados como particularmente hostiles a la libertad republicana”.
Alexander Hamilton (1787): “La violenta destrucción de a vida y la propiedad en la guerra, el esfuerzo continuo y la alarma consustancial al estado de peligro permanente, hará que las naciones más apegadas a la libertad pidan reposo y seguridad a instituciones que tienen una tendencia a destruir sus derechos civiles y políticos. Para obtener seguridad estarán dispuestos a correr el riesgo de ser menos libres”.
James Madison (1780): “El ejército con un Ejecutivo sobredimensionado no será por mucho un compañero seguro para la libertad [...] El peligro extranjero siempre ha sido el instrumento de la tiranía dentro del país”.
Thomas Paine (1776): “La sociedad en todos sus estados es una bendición, pero el gobierno, aún en su mejor estado, constituye un mal necesario y en su peor estado, uno intolerable”.
Thomas Jefferson (1782): “Un despotismo electo no fue el gobierno por el que luchamos”.
George Washington (1795): “Mi ardiente deseo es, y siempre ha sido, cumplir con todos nuestros compromisos en el exterior y en lo doméstico, pero mantener a los Estados Unidos fuera de toda conexión política con otros países”.
Benjamin Franklin (1787): “Este esquema de gobierno será probablemente bien administrado en el curso de años y puede sólo terminar en despotismo, tal como ha ocurrido con otras formas antes que él, cuando la gente sea tan corrupta como para necesitar un gobierno despótico, siendo incapaz de ningún otro”.
Benjamin Franklin (1759): “Aquellos que renuncian a libertades esenciales para obtener seguridad temporaria, no merecen ni la libertad ni la seguridad”.
George Mason (1781): “Un repaso permanente de los principios fundamentales es absolutamente necesario para preservar las bendiciones de la libertad”.